jueves, 1 de mayo de 2014

Sydney. Primeras impresiones

Hola amigos.

Disculpen la tardanza en publicar, pero entre una cosa y la otra se me fue el tiempo. Mas adelante les iré explicando y veran porque olvidé por un tiempo el blog. Lo cierto es que lo prometido es deuda y aquí el primero de unos cuantos post que estaré publicando en las próximas semanas... Siempre y cuando el trabajo lo permita.

Cuando comenzamos esta aventura teníamos muchas dudas, incertidumbres y miles de preguntas. Sin embargo, siempre estuvimos claros que la ciudad en la que queríamos cumplir este sueño era Sydney.

Siempre tuve una atracción por esta ciudad, que es el símbolo de Australia a nivel internacional y ofrece las estructuras más conocida de este país. Toma un tiempo entenderla pero luego tiene sentido una vez que te acostumbras a ella.

Una ciudad para visitar.


El CBD de Sydney es un sitio para visitar. Está diseñada con un sólo fin, ser el centro financiero y turístico de toda la ciudad. Ofrece una gran cantidad de atracciones para los visitantes y residentes. Variedad de comida, parques y espectáculos al aire libre, como fuegos artificiales todos los sábados en Darlin harbour.

Sin embargo, tanta inversión y tal enfoque tiene su precio. Todos los servicio son extremadamente costosos, el tráfico en horas pico puede ser un tanto desagradable (no tanto como el de Caracas, pero para nuestro nuevo estándar), el ruido de la ciudad puede espantar a cualquiera de vivir en el centro financiero. Sin embargo, es una cuestión de gustos. Hay gente a las que les gusta como hay gente quienes no.

Lo cierto es que incorpora mucha arquitectura moderna con antigua. Integra sus areas verdes al asfalto y cemento, con mucho respeto hacia la naturaleza. Se integra muy bien con la bahía de Sydney y tiene cerca las playas para surfistas y visitantes por lo que muchos andan en una onda playera. En fin, una ciudad muy agradable de visitar. 



Transporte


El servicio de transporte es quizás la mayor queja de todos. Los autobuses no tienen la puntualidad deseada, el servicio de tren es lento, los precios son excesivos y uno de los que más me molesta es el sistema de tickets que emplean.

Este tema es largo y amerita su propio post para darles una idea de lo que es andar día a día en él.  La foto es del monoriel que solía circular por el CBD. Ya lo desmantelaron pero tuvimos chance de montarnos en el...

Clima

El clima de Sydney se caracteriza por disfrutar de las 4 estaciones (Para nosotros los caribeños sobran 3 estaciones). Sin embargo, también está condicionado a la dirección del viento. En verano, un día puedes tener 25 grados y al día siguiente tienes 40. A veces parece una locura.

El primer verano la temperatura en la ciudad llegó a 47 grados, un solo día. Hacia tanto calor que a la media noche el termómetro marcaba 36 grados (no le llevamos nada a Maracaibo).

Eso sí, en invierno no baja de menos de 5 grados, pero cuando sopla la brisa , uno termina mentado a diestra y siniestra. El frío no es normal y menos para uno que no está acostumbrado. Una buena chaqueta (chamarra para mis amigos mexicanos) y mucha paciencia para acostumbrarse.

Arquitectura

En el CBD es donde se encuentran las estructuras más modernas. Sin embargo se mezcla con arquitectura vieja, que le dan un atractivo a la ciudad. Hay edificios a los que les montaron un edificio encima, preservando la fechada.


También es normal ver parques en todas partes. Los parques no tienen rejas, se hacen parte del recorrido a la oficina. Todos muy bien conservado. Hasta pude presenciar un día como cambiaban la grama en uno de los parques... Eso sí fue de otro nivel.

Adicionalmente, la ciudad tiene algo que no he visto muy a menudo. Una gran cantidad de las edificaciones tienen un techo que sobresale cubriendo las aceras de la lluvia y el sol. Sin duda una idea que hace más agradable caminar la ciudad.

La Gente

Ya para terminar, les comento sobre la gente. Esta vaina está llena de chinos, hindúes y también musulmanes, entre otros. Basta ir en autobús o tren y no tardas en darte cuenta que esto es un país de imigrantes, de los buenos y los malos.

Entre lo bueno puedo mencionar la gastronomía variada y... hummm... bueno hasta allí llegué.. Lo malo, la chinitas viejitas te atropellan en el mercado, los musulmanes se ofenden a la mínima, los hindúes.... bueno, es difícil de describir, simplemente fastidian quizás por su arrogancia, acento y su forma de hacer las cosas. Eso si, hay que armarse de paciencia cuando se anda en transporte porque de verdad, les juro que el pacuso es de otro nivel... Pepe Le Pew se quedó en pañales. Mi hermano, es una cosa asfixiante... a Val una vez se le salieron las lágrimas. Hay que ligarla antes de montarse, porque hemos tenido unos encuentros que dan miedo.

No todo es tan malo, recuerden que fueron nuestras primeras impresiones. Hay cosas que cambian, lo del pacuso no es una de ellas. Pero dentro de todo fue muy positiva nuestra impresión de está ciudad.